¡ME QUIERO VIVA Y LIBRE!

 

Miércoles, 5 Diciembre, 2018

Los alumnos de Formación Profesional Básica del colegio Julio Blanco  han hecho suyo este grito... ¡ME QUIERO VIVA Y LIBRE! No resulta sencillo iniciar un camino de reflexión que nos ayude a cambiar nuestro entorno. Demostrar a los demás que estar dispuestos y dispuestas a aportar nuestro grano de arena para que las cosas cambien, nunca es trabajo baldío. Tenemos que reseñar que en este curso  escolar no contamos con ninguna alumna, y que solo somos tres mujeres de los nueve integrantes del profesorado. Nos hemos hecho eco de la riqueza de diferentes agentes sociales expertos en estos temas que se han incorporado a nuestras aulas, agradeciéndoles siempre sus aportaciones.

El profesorado se dispuso a realizar cambios en el método de trabajo y desechó la charla, el mural, el texto leído… y todas estas actividades que se suelen programar aprovechando un día especial, el 25 de Noviembre. El proyecto debía calar en todos nosotros, en todo el centro, en el barrio, en Santander... y nos pusimos manos a la obra.
Cuando el 6 de noviembre llegaron  los alumnos al Centro, se encontraron  el patio con bolsas negras y cadáveres dentro, maniquíes disfrazadas de prostitutas, sangre en el patio y siluetas en la fachada. Pero lo más impactante fue encontrarse con una cruz clavada en el terreno anexo al recinto. Pretendíamos provocar reacciones en nuestros alumnos y no se dejaron esperar:" ¿Será Halloween?", "¡Ya empezamos!", "¡Estoy harto de los líos de las mujeres!" ... Y un largo etcétera de comentarios que han quedado recogido en diferentes formatos.
Durante la hora de tutoría todos los alumnos del Centro bajaron al patio, y los carpinteros trajeron del taller tantas cruces malvas como mujeres habían sido asesinadas en lo que iba de año. Una gran escuadra, mazo, cuerda y grapadora nos sirvieron para diseñar el cementerio.Este lugar, a lo largo del curso,  nos va a recordar el grave problema al que nos enfrentamos.
Cada alumno fue clavando una cruz y leyendo el nombre de la mujer asesinada. Fue un momento muy especial porque, aunque todos somos conscientes del valor simbólico del cementerio, fuimos también conscientes del gran número de cruces  que evidenciaba la tragedia diaria. Nuestro compromiso era  estar atentos a las noticias y dar un lugar en nuestro cementerio a las que, por desgracia, seguirán siendo asesinadas... ¡nadie desea colocar más cruces!  
El cementerio ha sido visitado por un gran número de personas que nos han preguntado el por qué  de este proyecto, y que han valorado  positivamente la idea y la necesidad de trabajar para que las cosas cambien.
Tras esta acción, nos quedó por delante un mes de trabajo, en el que nos  fuimos informando  de la realidad: datos estadísticos, conceptos relativos a la violencia de género, la trata de personas relacionada con la prostitución y la pornografía. También aprender a argumentar, a elaborar gráficas, a crear textos, a analizar lo que nos cantan y nos cuentan en las películas que hemos visto… Todo enmarcado e integrado en los módulos que deben estudiar estos alumnos de F.P.Básica.
Nos han ayudado en esta tarea las mujeres de MUJOCA a quienes pedimos que se encargaran de clarificar conceptos sobre la violencia de género y cómo poder detectar conductas machistas. La asociación Nueva Vida se encargó del taller sobre ¨la trata¨. De acuerdo o no con los contenidos que les han contado, estos jóvenes han tenido en sus manos muchos recursos con los que podrán  generar sus propias ideas. Este curso tenemos gente creativa y dos alumnos estuvieron dispuestos a colaborar de forma especial. Marlon realizó un diseño sobre la necesidad de libertad de las mujeres que acabó convirtiéndose en una chapa. Adrián compuso un rap en el que incluyó a todas las mujeres, partiendo de su madre, se acordó de las descalificaciones que sufren las chicas y no se olvidó de aquellas que no dejan de ser invisibles.
El proyecto estaba finalizando. El 23 de noviembre madres de alumnos y compañeras de 3º y 4º de Secundaria nos leyeron poemas que hablaban del dolor de los golpes, de la soledad de las mujeres, de su indefensión. Y no nos olvidamos de los niños y del terror al que se ven abocados. Recogimos  en una ¨presentación¨ las conclusiones del trabajo.
También leímos un cuento que nos ayudó  a  pensar frases sobre el significado del amor, que se convirtieron en "huellas pegadas" sobre el pasillo del centro. A cada participante se le entregó una chapa conmemorativa con el diseño de Marlon. Adrián pudo cantar su rap - atravesando los nervios- con la seguridad de cantar su verdad. Finalmente depositamos  un ramo de flores en nuestro cementerio al que desgraciadamente acompañó otra cruz. Los chicos ya se habían hecho eco de ese último asesinato. La prensa local y Telecantabria nos reservaron un lugar especial que agradecemos.

Y sobre todo, recogemos la satisfacción que han sentido estos alumnos al comprobar que son capaces de hacer las cosas bien, ¡MUY BIEN!