Capítulo 1º: Punto de partida

Para nosotros el acontecimiento culminante de las historia es JESUCRISTO. El da una perspectiva determinada del origen y el destino del hombre, de su dignidad y su misión en la familia, en el trabajo, y en la sociedad, y descubre el sentido último de la vida, de la historia y el mundo. Partiendo de estos presupuestos, el modelo de persona que queremos formar en nuestro Centro tiene las siguientes características:  

  1. Abierto a Dios para vivir con El en:
    1. Relación filial.
    2. Que sabe aceptar su plan de salvación.
    3. Que se entrega a la construcción de su Reino.
  2. Abierto a los demás. Que se sienta capacitado para:
    1. Aceptar y respetar la forma de ser y de vivir de los otros.
    2. Vivir en solidaridad y ser sensibles a los problemas y necesidades de los demás; sentirse hermano y estar disponible para servir a sus semejantes.
    3. Ser una persona capaz de vivir y trabajar en grupo.
  3. Abierto al mundo. Que sea:
    1. Critico ante la sociedad en la que vive.
    2. Creador de la comunidad humana.
    3. Comprometido con la consecución del bien común.
    4. Responsable en sus deberes cívicos.
    5. Libre y capaz de liberar a otros.
    6. Agente de cambio para conseguir un mundo al servicio de todos los  hombres.